Cuando hablamos de pintado industrial (y de pintura en general), pensamos siempre en un acabado que cumpla la doble tarea de embellecer y además proteger al producto pintado de los agentes atmosféricos, en caso de estar expuesto a ellos. Pero para que ello se cumpla, se debe verificar una condición muy importante.
La adherencia del acabado con el sustrato (o producto a pintar) es un requisito imprescindible para que puedan cumplirse esos principios de embellecimiento y protección.
En el caso de productos metalúrgicos, fabricados a partir de materiales en crudo, y donde intervienen procesos de transformación que contaminan la superficie con sustancias oleosas, entre otras, es preciso efectuar una limpieza de la superficie primero, y luego realizar un proceso (mecánico o químico) que garantice la perfecta unión entre el sustrato (la pieza metálica, por ejemplo) y las diversas capas de acabado.
Cuando ese proceso es químico, como en el caso de un fosfatizado, se le llama Anclaje químico, y es un paso impresindible para obtener un resultado óptimo en el pintado industrial.
EMYVEC realiza túneles de pretratamiento para realizar anclaje químico, como la instalación que se muestra a continuación, en su etapa de proyecto:
La instalación fue diseñada, proyectada, fabricada, montada y puesta en marcha para un fabricante de estructuras metálicas de Argentina. Consta de 4 etapas: Desengrasado, enjuague, fosfatizado y enjuague final. Las piezas recorren toda la línea a través de 35 metros de proceso.
En la siguiente galería puede verse la instalación ya funcionando.
